Maletas hechas para viajar a este país que hasta 1990
perteneció a la Unión Soviética y que no tiene litoral, aunque con sus 11.000
lagos no creo que echen mucho de menos el mar. Destaca también que el 40% de su
suelo es boscoso y que la mayoría de su población, unos 10 millones viven en
las zonas urbanas, cuya capital es Minsk.
Su gastronomía tiene mucha influencia de la rusa y la
ucraniana, de hecho los 3 países comparten sus platos típicos, como el “borsch” una sopa de remolacha.
Mi receta para el reto originalmente es
una bebida, de frutos rojos, pero también se hace como gelatina o como he hecho
yo tipo jarabe, que lo he usado para regar unas deliciosas tortitas americanas.
Era la opción que más gustó en casa.
Esta bebida normalmente es de arándanos,
manzanas, serbas o guindas. Pues yo lo he hecho de fresas, ya que estamos de
pleno apogeo de esta deliciosa fruta.
Ingredientes:
Para el kisel:
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250 g de fresas.
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150g de azúcar.
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250 ml de agua.
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1 cucharada sopera de maicena.
Para las tortitas
americanas:
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2 huevos.
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2 cucharadas soperas de azúcar.
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2 cucharadas soperas de harina.
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½ cucharada de café de aroma de vainilla.
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½ cucharada de café de levadura.
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1 pizca de sal.
Preparación:
Trituramos las fresas y reservamos.
Ponemos un cazo al fuego con el agua y el azúcar y dejamos
hacer, removiendo de vez en cuando, hasta que se forme un jarabe. Entonces
añadimos la maicena y mezclamos bien, que no se formen grumos, añadimos las
fresas y dejamos hacer hasta que reduzca un poco más.
Cuando coja la consistencia que nos gusta (en nuestro caso espesita) retiramos del
fuego y dejamos enfriar.
Mientras preparamos las tortitas americanas.
Lo primero que haremos será separar las yemas de las claras
y batiremos las yemas con el azúcar. Añadiremos después la harina, la levadura,
la vainilla y la pizca de sal y mezclamos bien, que no queden grumos.
Montaremos las claras a punto de nieve y lo mezclaremos con
movimientos envolventes a la mezcla anterior.
Ponemos una sartén con un poco de aceite de oliva, que
expandiremos por toda la sartén con papel de cocina e iremos haciendo las
tortitas.
El cucharón de sopa es perfecto para medir cada tortita: un cucharón…una
tortita.
Ponemos un cucharón en la sartén y dejamos hacer unos 3
minutos a fuego lento. Cuando esté tostadita por un lado es darle la vuelta y
otros 3 minutitos y ya estaría y así hasta acabar con toda la masa.
Ponemos las tortitas en un plato y regamos por encima con “kisel”
y solo queda disfrutar con este delicioso dulce…mmmmm
Si se prefiere cuando trituremos las fresas se puede colar,
para que el resultado final sea más tipo
jarabe. A mí me gusta tipo puré, o con aspecto de mermelada, por eso no las
colé. Eso ya va a gusto del consumidor.
BESOS.