Tarta de Halloween

Aunque ya sé que Halloween pasó (obvio, jejeje) y que ahora lo que toca son recetas de Navidad, quería subir esta tarta, que salió deliciosa. La decoración sencillita, mi primera y mínima, pero mínima, incursión con el fondant…A ver si os gusta.

Ingredientes:

-          250g de harina.

-          250 ml de leche.

-          115g de mantequilla a temperatura ambiente.

-          300g de azúcar.

-          2 cucharadas sopera de azúcar glas.

-          2 cucharadas de café de bicarbonato.

-          2 cucharadas de café de vinagre de vino blanco.

-          1 cucharada sopera de levadura.

-          2 huevos.

-          200 ml de nata para montar.

-          1 tableta de chocolate blanco para fundir.

-          5 galletas (dobles) oreo.

-          Un poco de fondant negro y otro poco de rojo.

-          3 galletas rectangulares.

-          Lápiz pastelero.

Preparación:

Precalentamos el horno a 180º.

En un bol tamizamos la harina, con la levadura, reservamos.

En otro bol mezclamos bien la mantequilla con el azúcar, tiene que quedar una crema. Vamos agregando los huevos de uno en uno, mezclando bien. A esta mezcla agregamos un poco de la harina tamizada y mezclamos, añadimos un poco de leche y seguimos mezclando, seguimos con más harina y más leche y así hasta acabar con todos los ingredientes.

En un vaso mezclamos el bicarbonato con el vinagre y lo agregamos a la masa anterior. Mezclamos.

Engrasamos un molde desmontable y vertemos sobre él la masa.

Metemos al horno unos 40 minutos.

Cuando el bizcocho esté hecho lo desmoldamos y dejamos enfriar. Una vez frío lo cortamos por la mitad.

Montamos la nata con las 2 cucharadas de azúcar glas y con ella rellenamos el bizcocho.

Lo volvemos a montar.

En un cazo derretimos el chocolate blanco con 2 deditos de leche y con él cubrimos la tarta.

Mientras se enfría vamos separando las galletas oreo y les quitamos la crema blanca (y nos la comemos, jejeje, como hice yo), las ponemos dentro de una bolsa y con un rodillo las aplastamos, el aspecto que tiene que quedar es como si fuera tierra, que iremos espolvoreando por encima del chocolate blanco.

Con el fondant negro cubriremos las galletas, dándole la forma de unas lápidas y con el rojo hacemos unas cruces, y decoramos la tarta. Con el lápiz pastelero escribimos sobre las lápidas y ya tenemos hecho un “tétrico”, sencillo y delicioso postre para el Halloween del año que viene, jejeje.

Fotos del corte no tengo porque la tarta la llevamos a casa de unos amigos y no llegué a tiempo antes de que se la comieran, jajaja.

 

Besos.