Tarta de queso al toque de kirsch.

Compré una botella de licor kirsch para participar en un reto y ¡claro! ahora tengo que gastarla. Bendito licor, jajaja, porque le da un toque a los dulces que me encanta…las “mini magdalenas” que hice para el reto estaban deliciosas y esta tarta ha quedado espectacular.

Cambié la base de galletas por bizcochos de soletilla, de los blanditos y se me ocurrió forrar el molde también con ellos, para hacer una especie de flor y no quedó tan mal, ¿no?, jejeje.

Ingredientes:

-          1 terrina de queso de untar.

-          200 ml de nata para montar.

-          200 ml de leche.

-          6 cucharadas soperas de azúcar.

-          2 sobres de cuajada.

-          Unos bizcochos de soletilla, de los blandos.

-          100 ml de licor kirsch.

-          Chocolate rallado y corazones de chocolate para decorar.

-          Un poco de colorante rojo.

Preparación:

Lo primero que hacemos es cubrir la base y los laterales del molde donde vamos a hacer la tarta de queso con bizcochos de soletilla.

En un cazo ponemos el queso, la leche, la nata, un poco de colorante rojo y el azúcar y batimos bien todo.

Lo llevamos al fuego y cuando vaya a hervir agregamos los sobres de cuajada y el licor kirsch, mezclamos bien.

Quitamos del fuego y seguimos batiendo con unas varillas. No tienen que quedar grumos.

Dejamos enfriar un poco.

Vertemos con cuidado en el molde, dejamos enfriar un poco y metemos en la nevera, que se enfríe del todo.

Cuando esté fría decoramos al gusto y volvemos a meter en la nevera. Sacaremos unos 20 minutos antes de consumir, para que no esté tan fría, ya que ahora no apetece tanto, jejeje.

Espero que os guste.

BESOS.